LAS 3 MAYORES MENTIRAS SOBRE EL VINO

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Desde Maite Geijo Vinos queremos desmentir algunas de las mayores mentiras que a día de hoy se siguen diciendo alrededor del mundo del vino. Mitos que se han creado por el boca a boca, algunos provienen de la elaboración y conservación de los vinos, pero la mayor parte son sobre su consumo y disfrute.

Las 3 mayores mentiras sobre el vino: 

1/ EL VINO TINTO SIEMPRE A TEMPERATURA AMBIENTE

Una de las mayores mentiras del vino, una frase que escucharemos sí o sí a lo largo de nuestra vida. Pero claramente es falsa. Si nuestro local o bien nuestra casa tiene una temperatura superior a los 20º provocaremos que se acentúa la acidez y el alcohol, por lo tanto estropearemos el sabor del vino, tanto en nariz como en boca.

Ya sabemos que los tintos se sirven siempre a una temperatura superior a los vinos blancos y espumosos.

El vino tinto debe enfriarse hasta los 12 a 18ºC como máximo, en función del tipo de vino.

2/ TODOS LOS VINOS MEJORAN CON EL PASO DEL TIEMPO

Cuantas veces hemos ido a casa de un amigo y nos ha enseñado orgulloso su vinoteca, repleta de vinos guardados durante años con la intención de descorcharlos en algún momento de su vida, para disfrutar de una joya que ha envejecido en su hogar. Pues bien, esta es una afirmación cierta sólo para un 10% del vino que se embotella ¡No todo el vino mejora con la edad! Los vinos jóvenes no sólo no mejoran a partir de un año de embotellado, sino que a partir de una edad son imbebibles.  La mayoría de los vinos están hechos para ser disfrutados de inmediato.

3/ HAY QUE DECANTAR Y OXIGENAR TODOS LOS VINOS

Todos tenemos un cuñado que nos quiere impresionar con su nuevo decantador, el cual se debe utilizar siempre y cuando sea beneficioso para el vino, no es un ritual continúo el hecho de decantar u oxigenar un vino cada vez que descorchamos una botella. Dependerá en función de factores como el tipo uva empleados en la elaboración del vino, el tiempo de maduración e incluso puede variar entre botellas de una misma bodega y añada.

Pero lo que tenemos que tener en cuenta es que decantar y oxigenar no es lo mismo y no todos los vinos se decantan.

Cuando decantamos tenemos que tener claro que su objetivo esseparar las partes sólidas, los sedimentos de la parte líquida del vino. No todos los vinos necesitan ser decantados porque no todos los vinos tienen sedimentos.

Cuando oxigenamos queremos que el vino libere todo su aroma ¡No todos los vinos necesitan oxigenarse! ¿Qué vinos necesitan oxigenarse?

  • Vinos con procesos de elaboración muy reductivos: Son vinos que han pasado muchos años en botella por lo que se se beneficia de entrar en contacto con el oxígeno.
  • Vinos jóvenes que están en proceso de envejecer: No son vinos con muchos años de crianza pero sí son vinos que tienen un gran potencial de envejecimiento. Para que liberen todo su potencial aromático y complejidad les ponemos (mediante la oxigenación) en contacto con el oxígeno, así se producen reacciones químicas que liberan todos sus aromas.

 

 

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